El Gobierno ha comenzado a permitir de nuevo los contactos entre organizaciones civiles surcoreanas y entidades de Corea del Norte, revirtiendo así la política restrictiva de la anterior Administración.
Según informó el miércoles 25 el Ministerio de Reunificación, el pasado 19 de junio se aprobaron dos solicitudes presentadas por organizaciones civiles para establecer comunicación con Pyongyang con fines estrictamente humanitarios. Estas constituyen las primeras autorizaciones de este tipo desde agosto de 2024, cuando Seúl permitió de manera excepcional un acercamiento tras las graves inundaciones que afectaron al país vecino.
Las autoridades surcoreanas explicaron que esta decisión responde a la necesidad de restablecer canales de comunicación no gubernamentales y de fomentar un clima de diálogo y cooperación en la península.
Durante el mandato del expresidente Yoon Suk Yeol, las solicitudes de contacto con Corea del Norte por parte de la sociedad civil fueron prácticamente bloqueadas, bajo el argumento de las continuas provocaciones norcoreanas y el deterioro de las relaciones bilaterales. Sin embargo, el nuevo Ejecutivo ha situado la reactivación de las conversaciones como una de sus prioridades, y este cambio de postura refleja ese compromiso.