La llegada de extranjeros a Corea del Sur con el visado de trabajo E-9, destinado a solicitantes con baja cualificación, ha disminuido en lo que va de 2025 como consecuencia de la desaceleración económica.
Según datos de las autoridades laborales, entre el 1 de enero y el 10 de junio han ingresado al país 28.520 personas con permiso E-9, lo que supone un 20,9% menos en comparación con el mismo periodo del año pasado.
El visado E-9 habilita la entrada de individuos con escasa cualificación o experiencia profesional, principalmente para cubrir vacantes en sectores que registran un déficit de mano de obra, como la manufactura, la construcción y la agricultura. Forma parte del Sistema de Permisos de Empleo, un marco legal e institucional que regula la incorporación de extranjeros a industrias específicas por un periodo determinado.
Cada año, el Gobierno establece un cupo máximo para la emisión de estos permisos. Hasta la fecha, el número de contratados en el marco del programa apenas representa el 21,9% de la cuota prevista para 2025.
La mayor caída en el empleo de trabajadores con visado E-9 se ha producido en el sector de la construcción, seguido de los de servicios, manufactura y pesca.