El Banco Mundial ha recortado su proyección de crecimiento global para 2025 ante el aumento de las fricciones comerciales y la persistente incertidumbre en materia de políticas económicas.

En su último informe "Perspectivas Económicas Mundiales", publicado el martes 10, el organismo redujo su estimación del 2,7% previsto a comienzos de año al 2,3%, lo que representa un descenso de cuatro décimas.

Aunque descarta una recesión internacional, el banco advirtió de que, si esta tendencia se mantiene durante los próximos dos ejercicios, el crecimiento medio de los primeros siete años de la década de 2020 sería el más bajo desde la de 1960.

Por países, se espera que Estados Unidos, protagonista de las recientes disputas arancelarias, registre una expansión del 1,4% en 2025, frente al 2,8% alcanzado el año anterior. China, su mayor contraparte en el conflicto comercial, ascendería un 4,5%, mientras que la Unión Europea y Japón experimentarían un alza del 0,7% cada uno.

No obstante, el estudio apunta que una relajación de las tensiones podría favorecer la recuperación. Según sus cálculos, si los principales actores lograran acuerdos para disminuir los gravámenes a la mitad respecto a sus niveles a finales de mayo, el crecimiento mundial podría incrementar en promedio 0,2 puntos porcentuales tanto en 2025 como en 2026.