La Policía ha identificado un total de 1.891 casos relacionados con delitos electorales, en los que están implicadas alrededor de 2.100 personas. De ellas, ocho han sido detenidas hasta el momento.
Entre las irregularidades más comunes detectadas figuran el soborno, la difusión de información falsa o infundada, la participación indebida de funcionarios públicos en actividades proselitistas, la violencia durante el proceso de sufragio y la movilización deliberada de votantes.
Según informaron las autoridades policiales, en comparación con los comicios presidenciales de 2022, han registrado un notable aumento de los delitos electorales cometidos de forma presencial, incluidas agresiones a candidatos o simpatizantes de ciertos partidos, así como daños o destrucción de material de campaña.