El presidente electo, ganador de los comicios del martes 3, asumirá el cargo de manera inmediata, sin un periodo de transición, debido al excepcional contexto sociopolítico en el que se desarrollan las elecciones.
El nuevo mandatario tomará posesión de sus funciones en cuanto se confirme oficialmente su victoria en las urnas. Desde ese momento, ejercerá plenamente las atribuciones propias del jefe del Estado, incluida la de comandante supremo de las Fuerzas Armadas.
La ceremonia de investidura tendrá lugar el miércoles 4, apenas un día después de la jornada electoral. El acto será breve y simbólico, limitado al juramento de posesión y a un corto discurso inaugural.