El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, adelantó el 30 de mayo (hora local) que su Ejecutivo duplicará los aranceles a las importaciones de acero y aluminio, del 25% al 50%. La medida entrará en vigor el miércoles 4.
El anuncio se realizó durante una visita a una planta de la empresa US Steel en West Mifflin, Pensilvania. Desde allí, Trump justificó la decisión como una acción necesaria para proteger la industria siderúrgica estadounidense.
Según varios analistas, el endurecimiento de los gravámenes responde a la reciente compra mayoritaria de US Steel por parte de la compañía japonesa Nippon Steel, operación a la que Trump se había opuesto durante su campaña electoral bajo el argumento de que suponía una amenaza para la seguridad nacional. No obstante, el 23 de mayo, el presidente dio su visto bueno a la transacción tras recibir garantías de que Nippon Steel realizará una inversión multimillonaria en la industria del acero en EEUU y que mantendrá los empleos actuales en US Steel.
Esta nueva subida arancelaria podría tener un impacto significativo en la siderurgia surcoreana, ya afectada por las políticas comerciales de la Administración Trump.