El Gobierno ha anunciado que seguirá de cerca las posibles repercusiones del reciente recorte del tipo de interés de referencia en el mercado inmobiliario y en los préstamos hipotecarios, especialmente en el área metropolitana de Seúl.

La medida llega tras la decisión del Banco de Corea de reducir el tipo de interés oficial del 2,75% al 2,5%, uno de los principales temas abordados en la reunión sobre asuntos macroeconómicos y financieros celebrada el viernes 30. En la sesión participaron el ministro de Economía y Finanzas en funciones, Kim Beom Seok, el gobernador del Banco de Corea, Rhee Chang Yong, el presidente de la Comisión de Servicios Financieros, Kim Byung Hwan, y el director del Servicio de Supervisión Financiera, Lee Bok Hyun.

Durante el encuentro, las autoridades evaluaron la situación global de los mercados financieros y cambiarios, que consideran estables en términos generales. No obstante, expresaron su preocupación por posibles episodios de volatilidad a nivel internacional, en particular por la evolución del proceso judicial en Estados Unidos en torno a los aranceles recíprocos del presidente de Donald Trump.

En cuanto al mercado de bonos corporativos, destacaron que las emisiones se están llevando a cabo con normalidad, impulsadas por una sólida demanda por parte de los inversores. Asimismo, señalaron que los diferenciales de crédito permanecen firmes. Sin embargo, advirtieron que persiste cierta cautela en torno a las empresas con calificación crediticia más baja, motivo por el cual el Gobierno se ha comprometido a reforzar la vigilancia sobre las condiciones de financiación de estas compañías.