La selección nacional de fútbol de Corea del Sur jugará en la madrugada del día 24, hora coreana, su último partido de la primera ronda del Mundial Alemania 2006. El rival será Suiza, a la cual se enfrentará con la sola intención de ganar.

El director técnico de la escuadra surcoreana, Dick Advocaat, se negó a hacer evaluaciones previas al encuentro. El único comentario que hizo fue que el empate no está dentro de los planes y que la única estrategia que tiene es la de derrotar a la selección alpina.

Los jugadores surcoreanos se trasladaron el día 22 a la ciudad de Hanover, en la que el representativo nacional se medirá con el equipo suizo.

En tanto, en Corea, los fanáticos previeron que el plantel surcoreano avanzaría a la ronda de los octavos de final con una victoria ante Suiza de 2 a 1. La opinión de los ciudadanos se reflejó en las predicciones hechas por los compradores de la lotería deportiva Toto. De las 27.295 personas que adquirieron el cartón, el 49,5% apostó que Corea ganaría, mientras que el 20,4% presintió que el partido terminaría en un empate.