Kim Song, embajador de Corea del Norte ante las Naciones Unidas, pronunció un discurso en la Asamblea General de la ONU, donde destacó que la situación económica en Corea del Norte está mejorando y destacando la estabilidad de su régimen.
Pero también aprovechó para criticar directamente a Corea del Sur y EEUU acusándolos de amenazar al régimen norcoreano con sus agresivos ejercicios militares conjuntos, además de destacar la creciente crisis nuclear en la península coreana, reafirmando que Corea del Norte no piensa renunciar a sus armas nucleares.
En cuanto al discurso del presidente surcoreano Yoon Suk Yeol, advirtiendo de las posibles transacciones de armas entre Corea del Norte y Rusia, señaló que dicho tema no incumbe a Corea del Sur.
El embajador norcoreano enfatizó que Estados Unidos está intentando crear una versión asiática de la OTAN y ha llevado al Nordeste de Asia a una nueva Guerra Fría.
Tras su discurso, el embajador adjunto de Corea del Sur ante la ONU, Kim Sang Jin, solicitó intervenir y refutó los alegatos del embajador norcoreano, que calificó como "ilógicos y sin fundamento".