Ingresaron el día 18 a Seúl los 25 desertores norcoreanos que habían sido deportados a Filipinas por las autoridades chinas luego de haber irrumpido por la fuerza en la Embajada de España en Beijing en busca de libertad y de su traslado a Corea del Sur. El grupo de desertores, compuesto por tres familias y tres individuos, salieron de Manila a las 12:40 de la tarde en un vuelo de Korean Air con destino a Seúl. Los mismos ingresaron a Surcorea a las 5:20 de la tarde del mismo día a través del Aeropuerto Internacional de Incheon. Los 25 norcoreanos, que habían pasado el fin de semana en instalaciones militares de Filipinas, se encuentran en un estado de salud relativamente bueno. Los mismos, luego de algunos días de descanso, serán sometidos a una investigación del Servicio Nacional de Inteligencia sobre el motivo de su deserción y la petición de asilo a Corea del Sur. Tras ello ingresarán, a la Casa de desertores Hanawon para recibir un curso de adaptación a la sociedad surcoreana. Por otro lado, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Filipinas, que había permitido la permanencia temporal de los desertores norcoreanos en su territorio, manifestó a través de su portavoz que ésta es la segunda vez que un grupo de norcoreanos hacen una parada temporal en sus tierras hasta llegar a Seúl. Señaló que esto no significa que habrá otros casos similares. Explicó que la presidente de Filipinas, Gloria Macapagal Arroyo, permitió el ingreso y permanencia en esa nación por motivos humanitarios y que para ello fue muy grande el esfuerzo del gobierno surcoreano.