El FMI ha respaldado la necesidad de ampliar la edad de jubilación en Corea, aunque advierte de que esta medida debe acompañarse de una reforma integral del sistema público de pensiones y de cambios en la estructura salarial.
En un informe especial sobre envejecimiento saludable y participación laboral en Corea publicado el miércoles 26, el organismo propone aumentar la edad legal de retiro de 60 a 65 años y, de forma paralela, retrasar la edad de acceso a la pensión nacional hasta los 68 años.
El FMI señala que, según estimaciones de la OCDE, elevar la edad de cobro de la pensión a 68 años para 2035 podría incrementar el empleo total en torno a un 14% y elevar el PIB de 2070 en un 12%, siempre que se mantenga la productividad de los trabajadores de mayor edad.
El informe advierte además de que retrasar la jubilación sería insuficiente si no se revisa previamente la estructura salarial del país. Asimismo, subraya que el sistema basado en la antigüedad dificulta la contratación y retención de trabajadores de más edad y que podría generar efectos adversos si se amplía la vida laboral sin avanzar hacia un modelo retributivo centrado en las funciones y el rendimiento.