Corea y Estados Unidos han cerrado una hoja informativa que recoge por escrito los resultados de las negociaciones bilaterales en materia arancelaria y de seguridad.
El presidente Lee Jae Myung afirmó el viernes 14 que el documento resume los compromisos alcanzados en las dos últimas cumbres y que las conversaciones sobre comercio y seguridad, consideradas hasta ahora el principal factor de incertidumbre para la economía y la defensa del país, han quedado finalmente resueltas.
Desde la sala de prensa de la Oficina Presidencial, Lee indicó que se establecerá "una alianza de cooperación cualitativamente distinta" que abarcará desde industrias estratégicas tradicionales, como la construcción naval y la energía nuclear, hasta sectores de futuro, entre ellos la inteligencia artificial y los semiconductores.
En materia de seguridad, detalló que Seúl y Washington acordaron avanzar de forma conjunta en el proyecto surcoreano de desarrollar submarinos de propulsión nuclear, considerado durante décadas un objetivo estratégico para la estabilidad en la península. En este sentido, añadió que Corea del Sur obtuvo también el respaldo de EEUU para ampliar sus facultades en el enriquecimiento de uranio y el reprocesamiento de combustible nuclear usado.
Asimismo, señaló que estudiarán medidas institucionales para permitir que no solo buques mercantes estadounidenses, sino también embarcaciones de la Marina de EEUU, puedan construirse en astilleros surcoreanos.
En cuanto a la presencia militar, Lee subrayó que la Casa Blanca reafirmó su compromiso con el estacionamiento continuado de sus tropas en la península y con su política de disuasión ampliada. Añadió que la parte estadounidense expresó además un apoyo explícito a la voluntad del Gobierno surcoreano de reforzar sus capacidades de defensa y avanzar en la transferencia del control operacional en tiempos de guerra.