El presidente Lee Jae Myung ha urgido a adoptar medidas concretas para proteger a las víctimas de los delitos cometidos contra ciudadanos surcoreanos en Camboya y garantizar la extradición de los responsables.
Los crímenes que más afectan a los coreanos en dicho país son las estafas laborales y las detenciones arbitrarias, que en los casos más graves incluyen otros actos ilícitos y abusos, como coacción y torturas.
Durante una reunión del Gabinete, Lee pidió a los ministros redoblar los esfuerzos para agilizar los procedimientos de cooperación entre las autoridades policiales coreanas y camboyanas, así como verificar de inmediato las denuncias de personas desaparecidas para determinar si entre ellas se encuentran ciudadanos que viajaron a Camboya.
Asimismo, el mandatario ordenó reforzar el sistema de apoyo a los ciudadanos en el extranjero, de modo que quienes acudan a las embajadas o sedes diplomáticas del Gobierno puedan recibir asistencia de forma rápida y eficaz.