El Ministerio de Reunificación presentó el martes 14 un plan de reforma organizativa que tiene como ejes principales el restablecimiento de la Oficina para el Diálogo Intercoreano, suprimida durante la anterior Administración, y la disolución del Despacho de Derechos Humanos Norcoreanos, que había sido utilizado para presionar a Pyongyang en el asunto de los derechos humanos, uno de los temas más sensibles para el régimen.
Los cambios responden a los objetivos del actual Gobierno del presidente Lee Jae Myung, entre los cuales figura la búsqueda de la coexistencia pacífica entre las dos Coreas y el progreso conjunto en la península coreana.
Entre las novedades también destaca la reinstalación del Equipo de Promoción de la Zona de Paz y Cooperación, que anteriormente se encargaba de las gestiones relacionadas con el complejo industrial de Kaesong. Asimismo, se anuncia la abolición del Equipo de Medidas sobre los Secuestrados, cuyas funciones pasarán a la Oficina para la Cooperación Sociocultural, responsable también de los asuntos relativos a las familias separadas. Finalmente, se restablecerá la Oficina para la Paz y el Intercambio, encargada de supervisar los contactos intercoreanos y las iniciativas de cooperación.
Con estas medidas, el personal del Ministerio de Reunificación aumentará de 533 a 600 funcionarios y recuperará así el nivel previo a los recortes aplicados durante el mandato del expresidente Yoon Suk Yeol, quien había criticado la labor del ministerio por, según sus palabras, ofrecer "una ayuda ciega" a Corea del Norte.