El Ayuntamiento del distrito berlinés de Mitte ha vuelto a ordenar la retirada de la Estatua de la Joven de la Paz, que recuerda a las mujeres coreanas forzadas a servir sexualmente a soldados japoneses durante la Segunda Guerra Mundial. La fecha límite fijada es el 7 de octubre y, en caso de incumplimiento, impondrá una multa de 3.000 euros.
El monumento fue erigido en 2020 en una calle céntrica por la ONG Korea Verband con autorización de las autoridades locales. Sin embargo, el distrito sostiene que se ha superado el plazo de dos años establecido para la instalación de obras temporales en espacios públicos.
En 2023 ya se había emitido una orden similar que alegaba que la presencia de la escultura podía afectar a los intereses de la política exterior de Japón. No obstante, un tribunal anuló aquella decisión y permitió que permaneciera en su lugar hasta el 28 de septiembre de este año. En su fallo, la corte consideró que un eventual impacto diplomático era previsible desde un inicio y que, mientras no existan pruebas de un perjuicio real, los intereses de política exterior no pueden prevalecer sobre la libertad artística.
Desde entonces, el Consistorio de Mitte y la ONG han mantenido negociaciones para reubicar la estatua, aunque sin alcanzar un acuerdo. Las autoridades llegaron a anunciar que la cooperativa berlinesa de viviendas MUT había ofrecido un terreno alternativo, pero Korea Verband puntualizó que se trataba de un gesto solidario y que la propia cooperativa tampoco deseaba hacerse cargo del traslado.
La organización insiste en que trasladar el monumento a un terreno privado limitaría la posibilidad de organizar actos públicos y reduciría su impacto político y artístico. Por ello, reclama que la escultura permanezca en su emplazamiento actual.