Corea del Sur ejercerá en septiembre la presidencia rotatoria del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, un año y tres meses después de haberla ocupado por última vez.
Durante su mandato, se prevé que el máximo órgano de seguridad internacional aborde cuestiones de gran relevancia global, entre ellas el conflicto entre Israel y Palestina, así como la guerra en Ucrania, que continúa sin visos de solución.
Actualmente, Corea del Sur ostenta un puesto no permanente en el Consejo de Seguridad, tras ser elegida por la Asamblea General de la ONU. Desde su adhesión a Naciones Unidas en 1991, esta es la quinta ocasión en que el país encabeza el organismo, tras haberlo hecho por primera vez en mayo de 1997. Su periodo como miembro no permanente se extenderá hasta diciembre de 2025.