Varios altos cargos estadounidenses han expresado su preocupación por el potencial sin precedentes de acciones militares de Corea del Norte contra Corea del Sur.
Jonathan Finer, subasesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, destacó durante un evento de Asia Society, un influyente think tank estadounidense, la persistencia de hostilidades por parte del régimen norcoreano.
En tanto Daniel Russel, ex subsecretario de Estado para Asuntos de Asia Oriental y Pacífico, y actual vicepresidente de dicho think-tank, advirtió que Kim Jong Un podría estar valorando realizar ataques más cruentos que el bombardeo de Yeonpyeong en 2010, subrayando la necesidad de estar atentos a posibles y repentinas acciones de gran impacto por parte de Corea del Norte.
Además, citando a varios altos cargos, el diario The New York Times publicó que al asumir una postura más agresiva hacia Corea del Sur, el Norte podría estar planeando alguna operación letal contra el Sur en los próximos meses.
Fuentes consultadas por el diario enfatizaron que el reciente aumento de tono en las declaraciones de Kim Jong Un debe tomarse en serio, aunque no necesariamente implica un riesgo de guerra inminente en la península. No obstante, advirtieron que una escalada de tensión podría derivar en un conflicto similar al de 2010.