Una agencia de inteligencia de Estados Unidos considera muy probable que Corea del Norte busque presionar política y diplomáticamente a otros países con su arsenal nuclear, máss que realizar un ataque real durante los próximos años.
El jueves 22, la Oficina del Director de Inteligencia Nacional (ODNI) de Estados Unidos divulgó un informe elaborado en enero por el Consejo Nacional de Inteligencia (NIC) sobre posibles escenarios de uso de armas nucleares por parte de Pyongyang hasta el año 2030.
Según el NIC, Corea del Norte podría servirse de su arsenal nuclear con tres propósitos: coercitivo, ofensivo y defensivo, enfatizando que lo más probable es que Pyongyang haga un "uso coercitivo", es decir, poseer armas nucleares para lograr fines políticos, pero manejando la tensión para minimizar el riesgo de represalias contra su régimen.
Definió el "uso ofensivo" como el destinado a cambiar radicalmente el equilibrio de poder en la península coreana mediante la fuerza, mientras que con "uso defensivo" alude al uso de armas nucleares en respuesta a posibles ataques de terceros países.
También consider altamente probable que el líder norcoreano Kim Jong Un recurrar a los medios coercitivos y lance diversas amenazas para proteger la seguridad de su régimen, sin descartar un mayor riesgo militar con artillería convencional, pero confiando en que su arsenal nuclear frenará una posible respuesta contundente a nivel militar de Corea del Sur y Estados Unidos.
La Inteligencia estadounidense estima que Kim Jong Un no usará sus armas nucleares para un ataque real, mientras que intentará asegurarse de poder lograr sus objetivos estratégicos solo con armas convencionales o armas químicas.