Estados Unidos realizó una prueba del misil balístico intercontinental Minuteman III, que lanzó desde la Base de Vandenberg de sus Fuerzas Espaciales en California, mientras Corea del Norte anticipa que próximamente lanzará su primer satélite espía militar.
Según informaron desde la base el miércoles 19 (hora local), el ensayo forma de las actividades regulares de las fuerzas estadounidenses para probar su capacidad de disuasión nuclear ante las nuevas amenazas del siglo XXI. Explicaron que fue un una prueba rutinaria, al igual que las más de trescientas realizadas hasta la fecha, y no guarda relación con los recientes movimientos geopolíticos del mundo.
El misil estaba desarmado aunque con dispositivos de prueba de reentrada en la atmósfera. El ensayo usó un sistema de control de lanzamiento aerotransportado (ALCS), del avión para guerras nucleares Mercury E-6B de la Armada estadounidense. El proyectil recorrió una trayectoria de 6.759 km.
Minuteman III tiene un alcance de 9.600 kilómetros y puede lograr una velocidad de 24.000 km/h portando una ojiva nuclear.