El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, expresó el martes que Washington se toma "muy en serio" la supuesta filtración de documentos clasificados del Gobierno estadounidense, y se comprometió a seguir trabajando en estrecha colaboración con socios y aliados.
Así se pronunció durante la rueda de prensa ofrecida el día 11 (hora local) tras la reunión de ministros de Defensa y Exteriores de Estados Unidos y Filipinas celebrada en Washington.
Austin afirmó haberse enterado de la filtración en la mañana del 6 de abril, y desde entonces se ha venido reuniendo cada día con altos funcionarios del Gobierno para adoptar las medidas oportunas, además de remitir el caso al Departamento de Justicia, que ya ha abierto una investigación criminal al respecto.
Destacó que los documentos filtrados tenían fecha del 28 de febrero y del 1 de marzo, y se comprometió a realizar una investigación exhaustiva para descubrir la fuente y el alcance de la filtración.