Cho Tae Yong, embajador de Corea del Sur en Estados Unidos, ha condenado las reiteradas provocaciones balísticas norcoreanas y llamó a Pyongyang a volver a la mesa de negociaciones.
Durante un encuentro con corresponsales surcoreanos en Washington D.C., el diplomático recordó el lunes 27 que Pyongyang lanzó otro misil intercontinental, actividad que Seúl reprueba. Consideró nefasto que Corea del Norte se empeñe en desarrollar misiles y armas nucleares, mientras sus habitrantes no tienen comida y muere de hambre.
Enfatizó que por esa vía Corea del Norte solo obtendrá sanciones internacionales más duras y reforzar la alianza entre Seúl y Washington, como ya refleja la cooperación tripartita entre Corea del Sur, Estados Unidos y Japón, las maniobras áereas surcoreano-estadounidenses y el anuncio de sanciones independientes por parte de Seúl.
Cho destacó los avances para reforzar la disuasión extendida, como el simulacro de operación de equipos disuasorios que Corea del Sur y Estados Unidos realizaron la semana pasada en la sede del Pentágono, o su visita a la Base naval de submarinos Kings Bay.
Informó que Seúl y Washington siguen intentando aumentar la disuasión extendida en sintonía con el compromiso renovado en mayo por el presidente Joe Biden, de impulsar esa estrategia por todos los medios, incluidos equipos nucleares.