Corea del Sur y Estados Unidos seguirán debatiendo sobre la Ley de Reducción de la Inflación y la preocupación de Seúl por las desventajas para las automotrices surcoreanas tras su implementación en el mercado estadounidense de vehículos eléctricos.
Al finalizar el séptimo Alto Diálogo Económico entre ambos países, Lee Do Hoon, viceministro de Exteriores de Corea del Sur, y José W. Fernández, subseccretario de Estado oara el Crecimiento Económico, Energía y Medio Ambiente, emitieron el lunes 12 una declaración conjunta. Estados Unidos reconoció que las inversiones surcoreanas en su territorio para fabricar coches eléctricos y baterías contribuyen a la economía y la seguridad nacional de ambos países, así como al objetivo común de promover el uso de energías limpias.
En tanto, el ministro surcoreano expresó la postura y las inquietudes de Seúl sobre la ley antiinflación, al tiempo de solicitar la cooperación de Washington para reflejarlas al máximo posible en el reglamento vinculado del Departamento del Tesoro estadounidense.
Fernández explicó que la administración de Biden conoce Corea del Sur y analiza distintas perspectivas en respuesta.
En paralelo, ambos también hablaron de suministros, enfatizando la necesidad de estrechar la cooperación para consolidar un ecosistema que garantice un abastecimiento estable de bienes clave, como chips, baterías y minerales.