Tokio sigue insistiendo al Gobierno surcoreano para que desmantele la Estatua de la Joven de la Paz, en homenaje a las víctimas de explotación sexual durante la Segunda Guerra Mundial, instalada frente al antiguo edificio de la Embajada de Japón en Seúl.
Hirokazu Matsuno, ministro portavoz de Japón, aludió el lunes 13 al acuerdo intergubernamental establecido por ambos países en 2015, donde Corea del Sur reconoce la inquietud de Tokio por el bienestar y la integridad de su embajada en Seúl. En base a dicho acuerdo, Japón ha venido insistiendo al Gobierno surcoreano que adopte las medidas oportunas, y se mantendrá en esa línea.
La Estatua de la Joven de la Paz rememora la atroz experiencia sufrida por las mujeres que fueron explotadas sexualmente por el Ejército nipón durante era colonial, sobre todo en tiempos de guerra. La primera fue inaugurada el 14 de diciembre de 2011 frente al ex edificio de la Embajada de Japón en Seúl, a la que siguieron 143 estatuas más en Corea del Sur y 16 en el extranjero.