La Conferencia Ministerial sobre Mantenimiento de Paz de Naciones Unidas, organizada por Corea del Sur y por primera vez por un país asiático, culminó el miércoles 8. La presente edición tuvo que cambiar de formato presencial a virtual en el último momento por el riesgo de la nueva variante de coronavirus y el fuerte repunte de contagios a nivel internacional.
Pese a todo, se llevaron a cabo cuatro sesiones en las que participaron representantes de 75 naciones, de la Unión Europea y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte. Unos sesenta estados se comprometieron a hacer donaciones para aumentar los equipos estratégicos de operaciones de mantenimiento de paz, a a agilizar el envío de tropas y mejorar el entrenamiento de las fuerzas. Corea del Sur, en particular, se comprometió a ejercer un papel central en la creación de "bases inteligentes" y a proporcionar dieciséis helicópteros para las misiones en África.
Los países participantes también expresaron su voluntad de ofrecer equipos aéreos, como aviones transportadores o drones, a contribuir a los entrenamientos anti-explosivos, a enviar tropas o agentes policiales para misiones de paz, a compartir vacunas contra COVID-19 y a cooperar con programas de integración de la mujer en operativos de mantenimiento de paz.
Finalmente, expresaron su apoyo a la Iniciativa de Seúl, emitida por el Gobierno surcoreano para ayudar a las fuerzas de mantenimiento de paz de Naciones Unidas a mejorar tanto su nivel técnico como su capacidad médico-sanitaria.