El embajador surcoreano en Japón, Kang Chang Il, ha explicado que por ahora no es posible un cambio radical en las relaciones entre Seúl y Tokio, pese a la llegada de Fumio Kishida, nuevo primer ministro.
Durante una interpelación parlamentaria mantenida por videoconferencia el miércoles 6, el embajador explicó que, como ex canciller con amplia experiencia diplomática, probablemente Kishida adopte una postura abierta ante los temas pendientes con Seúl, en un intento por mejorar las relaciones bilaterales a través del diálogo.
No obstante, consideró difícil lograr un cambio inmediato, aunque el Gobierno surcoreano seguirá cooperando con el nuevo gabinete de Tokio para desarrollar una relación bilateral con perspectivas de futuro.
También aseguró que se esforzará al máximo por llegar a un acuerdo sobre los problemas históricos con Japón, y también sobre el plan de vertido de aguas contaminadas de Fukushima al océano.