Estados Unidos, junto con sus aliados y otras naciones, emitieron el domingo 29 una declaración en la que manifiestan su compromiso con las operaciones de evacuación de civiles de Afganistán, incluyendo a sus ciudadanos y a los propios afganos.
El Departamento de Estado comentó que Washington se esfuerza por garantizar la salida de Afganistán, no solo de ciudadanos y funcionarios estadounidenses, sino también de afganos que están en peligro. Agregó que para ello obtuvo de los talibanes el consentimiento de que permitirán el libre y seguro desplazamiento a zonas fuera de Afganistán de extranjeros, así como de afganos que cuentan con permisos de viaje de Estados Unidos.
La declaración fue apoyada por aproximadamente cien países, entre aliados de Estados Unidos como Corea del Sur, Japón, Alemania, Reino Unido y Francia, así como otros estados-miembro de la Organización del Tratado del Atlántico del Norte.