El miércoles 7, Corea del Sur reportó 1.212 casos de COVID-19: 1.168 domésticos y 44 del exterior, el segundo mayor volumen diario de contagios desde que el coronavirus llegó al país.

El 80% de los contagios locales se concentran en la zona capitalina, con 577 casos en Seúl, 357 en Gyeonggi y 56 en Incheon. 

Mientras los expertos advierten de una nueva ola de contagios, el Gobierno ha decidido mantener una semana más las actuales pautas de distancia social en la zona capitalina. 

Así, se mantiene la prohibición de reuniones privadas de más de cuatro personas y las restricciones en instalaciones de uso público, limitando el horario de restaurantes y cafeterías hasta las 10:00 de la noche. 

El Gobierno valora incluso aplicar el Nivel 4 de distancia social - el mayor del nuevo esquema-, si la situación no mejora. 

También realizará test preventivos en comercios con más de 50 empleados, y habilitará centros de pruebas en zonas con gran afluencia de jóvenes. 
 
En tanto, a partir del 8 de julio entrarán en vigor las normas de aplicación de la Ley de Prevención de Enfermedades Infectocontagiosas, que incluyen estrictas sanciones, como el cierre de locales durante 10 días por incumplir las pautas de prevención.

Por otra parte, Seúl prohibirá tomar bebidas alcohólicas después de las 10 de la noche en 25 parques urbanos. El incumplimiento de esta norma será multado con 100 mil wones.