Corea del Sur ha reportado un caso de trombosis al fallecer una persona tras recibir la vacuna de AstraZeneca.
En la sesión plenaria del Comité de Salud y Bienestar de la Asamblea Nacional, celebrada el miércoles 17, Jeong Eun Kyeong, directora del Centro de Control y Prevención de Enfermedades confirmó que una mujer de unos sesenta años internada en un centro de atención especial sufrió un episodio de trombosis tras ser vacunada con AstraZeneca.
Pese a todo, recordó que tanto la OMS, la Organización Mundial de la Salud, como la Agencia Europea de Medicamentos no han podido establecer una relación directa la vacuna de AstraZeneca y los casos de trombosis. En tanto, los resultados provisionales de las investigaciones surcoreanas también descartan una correlación causa-efecto y seguirán usando AstraZeneca para vacunar.
En tanto, a partir del miércoles 17 entró en vigor una orden ejecutiva del Ayuntamiento de Seúl que obliga a todos los trabajadores extranjeros residentes en la capital a someterse al test de coronavirus.
La medida forma parte del control sobre extranjeros y viajeros procedentes del exterior, al propagarse en el país otras variantes de coronavirus.
Así, todos los trabajadores foráneos en Seúl y sus empleadores deberán someterse al test antes del 31 de marzo. El incumplimiento puede conllevar multas o sanciones administrativas.