El presidente Moon Jae In visitó una fábrica de jeringuillas especiales para vacunación contra COVID-19, ubicada en la ciudad de Gunsan, provincia de Jeolla del Norte.
En concreto, inspeccionó las instalaciones de PoongLim Pharmatech, empresa que ha desarollado una jeringa con émbolo de poco espacio muerto (LDS por sus siglas en inglés), que permite minimizar pérdidas al reducir el espacio entre el émbolo y la aguja. Esta jeringuilla permite inocular hasta seis dosis, una más que con las comunes, y dicho producto surcoreano obtuvo recientemente la autorización de uso por parte de la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) de Estados Unidos.
Según el mandatario, la jeringuilla LDS permitirá ahorrar hasta un 20% de medicación, generando un efecto similar a un 20% más en producción de vacunas.
También subrayó que Corea pudo asegurar a tiempo productos suficientes para luchar contra el COVID-19, gracias a que las pymes surcoreanas no temen probar nuevas cosas o innovar. También se comprometió a no escatimar apoyo a las empresas innovadoras que se esfuerzan por ofreer productos para luchar contra la pandemia, no solo para consumo interno sino también para exportar, pese a la dificultad de la situación.
PoongLim Pharmatech decidió ofrecer gratuitamente 127 mil jeringuillas a la ciudadanía, mientras que el Gobierno planea comprar 40 millones para vacunas contra COVID-19 a otros dos fabricantes nacionales, Shina Corporation y Doowon Meditec.