Aunque los casos de COVID-19 remiten lentamente, las autoridades sanitarias consideran prematuro bajar la guardia al fluctuar el volumen de contagios, que disminuye tras el fin de semana, pero aumenta en miércoles y jueves.
Así, antes de rebajar las pautas de distancia social, optarán por contener y disminuir el número de casos diarios.
Al respecto, el primer ministro Chung Sye Kyun declaró el lunes 11 que, si bien los contagios empiezan a remitir, la mejoría del país deriva del duro sacrificio de los comerciantes. También anticipó que en unos días el Gobierno decidirá al respecto, eliminando aquellas medidas que considere irracionales, poco equitativas o difíciles de aplicar.
Pese a todo, recalcó que la posible relajación de medidas se hará desde la prudencia, tras volver a detectar casos en call-centers en Seúl, Gyeonggi y Daegu, muchos de los cuales ni siquiera observan las pautas básicas sanitarias y de distancia social.