El secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo, a quien le queda poco tiempo en el cargo, ha lamentado no haber podido lograr la desnuclearización norcoreana durante su mandato.
Durante una entrevista con Bloomberg TV que divulgó el Departamento de Estado estadounidense, explicó que nada más ser investido, el presidente Donald Trump asumió como tarea prioritaria rebajar la tensión entre Washington y Pyongyang.
Recordó que entonces Corea del Norte ya poseía una capacidad nuclear real y la Administración Trump entendió que la mejor forma de avanzar en los temas norcoreanos era mediante la diplomacia de cumbres.
Esa fue la motivación que sirvió de base a las cumbres de Singapur y de Hanói, donde el líder norcoreano se comprometió a cooperar con la desnuclearización. No obstante, Pompeo estimó que fracasaron en sus objetivos, y consideró que Kim Jong Un no estaba preparado para concretar el desarme nuclear.
Concluyó que algún día Kim entenderá el mensaje en que tanto insistía Trump, al resaltarle que su ambición nuclear pone en peligro a la población norcoreana y que renunciar al desarrollo nuclear permitiría a Corea del Norte un futuro más próspero y brillante.