Un gran incendio se apoderó de un edificio de 33 pisos en Ulsan, al sureste de Corea del Sur, en la noche del 8 de octubre.
El incendio se declaró en la parte baja del edificio pero pronto comenzó a ascender hasta envolver la estructura por completo.
Dicho incidente no dejó víctimas mortales, pero unas 91 personas fueron trasladadas al hospital por inhalación de humo o lesiones.
El fuego se controló unas dos horas después y tras 13 horas y media de labores por parte del cuerpo de bomberos las llamas se extinguieron totalmente, por lo que se dará inicio a investigaciones para conocer las causas del incendio.