Hasta las 0 horas del miércoles 2, Corea del Sur reportó 267 nuevos casos de coronavirus: 253 domésticos y 14 importados. Si bien, el número de contagios se mantiene por debajo de los 300 por cuarto día consecutivo, la cifra aumentó ligeramente, elevando también el número de pacientes graves hasta 124 personas, tras sumar 20 nuevos solo el martes.
Las autoridades de cuarentena prevén que el número de pacientes graves seguirá aumentando, al superar el 40% la proporción de mayores de 60 años entre los casos vinculados a las iglesias y las protestas del 15 de agosto.
Así, el Gobierno planea habilitar 110 camas más para pacientes graves hasta finales de septiembre, y asignar nuevos centros de tratamiento a pacientes en estado crítico por coronavirus, al tiempo de reforzar la falta de mano de obra con personal del Ejército.
En cuanto a la próxima festividad de Chuseok, ha aplazado una semana la venta de reservas anticipadas de billetes de tren, inicialmente programada el 2 de septiembre, y solo ofrecerán asientos de ventana para mantener la distancia entre pasajeros.
Además, el primer ministro Chung Sye Kyun urgió a la población a actuar con solidaridad y paciencia, y a respetar las pautas de distanciamiento social, reiterando que esta semana es decisiva para frenar la propagación del coronavirus.
El premier recordó que persisten los contagios en pequeños colectivos y el volumen de casos de origen desconocido ha aumentado al 25%, convirtiéndose en un factor inquietante.