Reino Unido ha creado un nuevo organismo público a cargo del sistema sanitario del país, que tomará como referencia el modelo surcoreano contra el COVID-19.
Según informó la emisora británica BBC el día 18 (hora local), el estamento denominado Salud Pública, piedra angular del sistema sanitario estatal británico a cargo de gestionar brotes infecciosos, se fusionará con el servicio de rastreo de contactos del Gobierno en un nuevo organismo bajo el nombre de Instituto Nacional para la Protección de la Salud.
La supresión de Salud Pública, entidad responsable de las emergencias sanitarias, llega después de que Reino Unido sufriera la mayor tasa de mortandad en Europa, con más de 55.634 muertes por coronavirus, según cálculos de Reuters.
Los ciudadanos culpan a Salud Pública de no haber realizado más pruebas de coronavirus al brotar la crisis, de abandonar un programa de rastreo al aumentar el número de casos y de no compartir la ubicación de infectados con las autoridades sanitarias locales.
Así, el Instituto Nacional para la Protección de la Salud reemplazará a dicho organismo en su misión de proteger a la gente de amenazas externas como armas biológicas, pandemias y enfermedades infecciosas.
Según explicó Matt Hancock, ministro de Sanidad británica, el nuevo instituto "aprenderá" del sistema sanitario del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Corea del Sur y del Instituto Robert Koch en Alemania, para mejorar la capacidad de respuesta ante el COVID-19 y ante otros posibles brotes de epidemias a futuro.