Seúl y Washington comenzaron el martes 18 el entrenamiento militar conjunto del segundo semestre, que continuará hasta el 28 de agosto en Corea del Sur.
Inicialmente el ejercicio estaba planificado para el día 16, pero fue postergado al dar positivo en coronavirus un oficial de esas maniobras. Si bien otros militares que mantuvieron contacto con él dieron negativo en las pruebas, tuvieron que ser sustituidos para evitar contagios.
El calendario previsto buscaba verificar la capacidad operativa de Corea del Sur ante una hipotética guerra durante las maniobras del segundo semestre del año, pero solo comprobarán algunos factores esenciales y centrarse en simulaciones por computadora, ante los límites de traslado de efectivos estadounidenses por la pandemia.
Así, el entrenamiento tendrá una escala menor y se centrará en simulaciones por computadora, para evaluar la gestión de contingencias y la capacidad operativa en caso de una guerra.
Por ahora la evaluación para el traspaso del mando militar en tiempos de guerra del Ejército estadounidense al surcoreano quedará para la próxima edición, ante la complejidad de trasladar efectivos estadounidenses a Corea por la pandemia.