Las lluvias torrenciales de verano han dejado las mayores pérdidas humanas desde 2011, año en que 78 personas fallecieron o desaparecieron por precipitaciones y tifones.
Entre el 1 y el 11 de agosto de 2020, el periodo de mayores daños, 33 personas murieron, nueve desaparecieron y ocho resultaron heridas por las lluvias torrenciales. En concreto, el número de fallecidos aumentó el martes 11 al hallar los cadáveres de dos desaparecidos: un hombre víctima de una avalancha mientras estaba en su coche y una mujer que desapareció en la localidad de Eumseong, provincia de Chungcheong del Norte.
Por ahora el recuento arroja 7.000 damnificados, de los cuales unos 3.000 aún continúan en refugios provisionales.