Hasta el 16 de julio Corea del Sur acumula 13.612 casos de COVID-19, tras detectar 61 más durante el miércoles 15. Los nuevos casos intradía superaron nuevamente la línea de sesenta, mientras aumentan notablemente los contagios procedentes del exterior. De los nuevos casos del miércoles, 47 son importados y 14 domésticos. 

En base a estos datos, las autoridades del Gobierno surcoreano evaluaron el jueves 16 que los contagios en pequeños colectivos en Seúl y alrededores han disminuido, además de asegurar un control estable de la epidemia en el país. Como mayor elemento preventivo, destacaron el estricto cumplimiento de las pautas sanitarias, incluyendo el uso permanente de mascarillas. 

En este sentido, destacaron lo ocurrido en una iglesia en Suwon con una comunidad de unos 9.000 fieles, a la que fueron algunos pacientes de COVID-19 varias veces, pero no surgieron casos adicionales al respetar cabalmente la pauta sobre uso de mascarillas.

En cambio, los casos importados muestran un alarmante ascenso, al detectar contagios entre trabajadores coreanos procedentes de Irak y marineros extranjeros que llegaron a los puertos de Corea.