Más de 20 personas que realizaron donaciones a la Casa de Compartir, un refugio para las víctimas de esclavitud sexual, presentaron el día 4 una demanda exigiendo la devolución de los donativos, ante las sospechas de desvío de fondos.
Los demandantes lamentaron que las donaciones realizadas para ayudar a las víctimas de la esclavitud sexual a manos del Ejército japonés en tiempos de guerra hayan sido usadas por particulares e instaron a devolver todo el dinero.
En la demanda colectiva figuran 23 personas y solicitan la devolución de unos 50 millones de wones, y no descartan interponer nuevas demandas en caso de adherirse otros donantes.
Actualmente la Casa de Compartir acoge a cinco víctimas de la esclavitud sexual. El mes pasado, siete trabajadores de la entidad que gestiona dicho establecimiento revelaron que los donativos no fueron usados para ayudar a las víctimas de la residencia.