La Policía y el Cuerpo de Bomberos iniciaron una investigación oficial para esclarecer las causas del incendio de Icheon, producido la tarde del miércoles 29, una catástrofe que dejó al menos 38 muertos. En las indagaciones intervienen también funcionarios y agentes de otras cinco entidades públicas, como el Servicio Forense Nacional, la Corporación Coreana de Energía Eléctrica y el Ministerio de Trabajo y Empleo.
Por lo pronto, las autoridades competentes estiman que el incendio pudo haberse desatado debido a los vapores de aceite que estaban suspendidos en el lugar del accidente, dadas las obras que estaban en marcha para rellenar las paredes con uretanos. La hipótesis más convincente de momento es que esos vapores pudieron haber explotado al reaccionar con un material combustible aún no identificado.
El equipo de investigación consta de 125 agentes y ya terminó el interrogatorio a seis trabajadores de la empresa a cargo de dichas obras, así como a 11 testigos, mientras que sobre 15 empleados o ejecutivos clave de esa misma compañía se emitió una orden de prohibición de salida del país.