Se prevé que los delitos sexuales cometidos mediante soporte digital, como la producción y distribución de vídeos de explotación sexual de menores, serán penados en adelante con hasta trece años de prisión. 

Al respecto, la Comisión de Sentencias del Tribunal Supremo ha sometido a revisión un paquete de nuevos criterios judiciales, para sancionar con entre cinco y nueve años de prisión los delitos sexuales cometidos a través de medios digitales o cibernéticos, aún en casos considerados leves, y penas máximas de entre nueve y trece años para los más graves. Incluso podría tipificar esos delitos con más de trece años de prisión en caso de existir circunstancias agravantes, como un elevado número de víctimas. 

El Código Penal surcoreano actual fija una gama de sanciones demasiado amplia, de entre cinco años de prisión hasta cadena perpetua, contra delitos sexuales digitales, pero mediante una tipificación genérica del hecho delictivo. Por tanto, muchos de estos delitos se saldaban con penas relativamente suaves en base a pactos entre las partes, o por la aplicación de atenuantes.

Actualmente, uno de los ciberdelitos sexuales que más indignación provoca en Corea del Sur, motivo de esta revisión, es la producción de vídeos de explotación sexual de menores o pornografía infantil.