El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha declarado, el día 24 (hora local), que sea cual sea el "regalo de Navidad" de Corea del Norte, Estados Unidos está listo a enfrentarlo con éxito.

Así lo expresó durante una rueda de prensa en Mar-a-Lago Resort, en Florida, tras mantener una llamada telefónica con un alto oficial militar, dejando entrever que Estados Unidos está preparado ante cualquier provocación del Norte.

No obstante, al ser preguntado si tenía medidas concretas ante un posible lanzamiento de misiles de largo alcance por parte de Pyongyang, evadió la respuesta diciendo que "el regalo podría ser un simple florero."

Al respecto, los medios estadounidenses emitieron pronósticos dispares, entre los que alegan el fracaso político de Trump con respecto a Corea del Norte, y los que interpretan las provocaciones de Pyongyang como una señal de su deseo de negociar con Washington, y que por tanto señalan la diplomacia como la única solución viable.

Durante la rueda de prensa, el presidente Trump repitió hasta cuatro veces la frase "veamos qué ocurre", en su típico estilo discursivo. Sin embargo, algunos expertos lo interpretan como un indicio de que algo está en proceso entre Estados Unidos y Corea del Norte.