Seis meses después del hundimiento de un barco turístico en el río Danubio, en Hungría, el capitán de la embarcación que provocó el naufragio ha sido procesado.
La Fiscalía húngara acusó al capitán, de nacionalidad ucraniana, el jueves 28, hora local, por "negligencia criminal en vía de navegación pública", así como por omisión del deber de socorro a las víctimas tras el incidente fluvial.
Al respecto, los fiscales afirman que durante varios minutos antes de la colisión el capitán mostró una conducta errática, al tiempo de no mantener la distancia de seguridad suficiente.
De probar las acusaciones en juicio, la Justicia podría condenarle con hasta 11 años de prisión. Pero si admite las acusaciones en contra y renuncia a ir a juicio, la Fiscalía solo pedirá 9 años de cárcel.
Aunque el sospechoso salió de prisión preventiva, debe comparecer periódicamente ante el juzgado, dar parte de su domincio y llevar una tobillera electrónica.
Un barco turístico con 35 personas a bordo -en su mayoría personas coreanos- chocó con el barco Viking Sigyn en el Danubio el 29 de mayo de este año, provocando la muerte de 25 pasajeros coreanos y dos tripulantes húngaros. Hasta la fecha, uno de los pasajeros coreanos no ha sido hallado.