Víctimas coreanas y filipinas de la esclavitud sexual impuesta por Japón durante la Segunda Guerra Mundial celebraron conjuntamente el día 20 la edición número 1.414 de la "protesta de los miércoles" en Seúl.
En concreto, a la protesta asistieron dos víctimas filipinas, que el pasado agosto revelaron por primera vez la atroz experiencia vivida tras ser reclutadas a la fuerza por el Ejército japonés para servir sexualmente a los soldados, cuando apenas estaban en la pubertad.
Aprovechando el encuentro, una asociación que defiende los derechos de las víctimas de esclavitud sexual en Filipinas propuso conformar alianzas para lograr más voz al denunciar los crímenes cometidos por Japón en el pasado y exigir una disculpa al Gobierno de ese país.