El representante especial de Estados Unidos para asuntos norcoreanos, Stephen Biegun, ha advertido que ni Estados Unidos ni el resto del mundo tolerarán el desarrollo de armas de destrucción masiva de Corea del Norte.
Así lo expresó Biegun el día 6, hora local, en un discurso en su alma máter, la Universidad de Michigan, donde calificó el continuo desarrollo nuclear norcoreano como una "rebeldía" contra los estándares internacionales y una violación de las resoluciones de la ONU.
También destacó la necesidad de impulsar las negociaciones entre Washington y Pyongyang, al reafirmar la posición de la Casa Blanca de prometer un futuro mejor al país norteño si opta por el camino de la desnuclearización.
Asimismo, hizo hincapié en la importancia de la cooperación entre ambos países para superar cualquier animosidad, instando al régimen de Kim Jong Un a regresar a la mesa de negociaciones.
Con respecto a las protestas de Corea del Norte por los ejercicios militares conjuntos entre Corea del Sur y Estados Unidos, Biegun explicó que el papel de las tropas estadounidenses estacionadas en el Sur actualmente está centrado en una "hipotética guerra", pero podría ser reevaluado cuando la amenaza de seguridad desaparezca de la península coreana.