Según un reportaje de KBS, un joven de 23 años alistado en el Ejército surcoreano trató de afiliarse al grupo insurgente Estado Islámico, y fue aprehendido por vulnerar la Ley antiterrorista. 

El reportaje destaca que empezó a recopilar datos sobre EI desde 2016, antes de ingresar al servicio militar, actividad que mantuvo hasta la fecha, al tiempo de ser acusado de hacer propaganda de las actividades terroristas de esa organización con vídeos editados por él. 

El soldado tenía instalado en su móvil una app secreta, usada por los integrantes de EI y otros afines a ese grupo, e incluso recibió un correo electrónico con indicaciones sobre cómo adherirse formalmente a Estado Islámico. 

Además, las autoridades descubrieron vídeos en su teléfono móvil sobre cómo fabricar balas caseras, así como de armas similares a las que usan los terroristas compradas por internet, y de explosivos militares robados mientras recibía adiestramiento en el Ejército.