El Gobierno de Japón anunció el día 30 que a partir del 1 de junio reforzará la inspección de productos marítimos importados de Corea.
En concreto, aumentará del actual 20% al 40% la inspección a lenguados de Corea del Sur.
Esta medida se interpreta como represalia por la prohibición de importar marisco de Fukushima y de otras siete prefecturas aledañas, que el Gobierno surcoreano impuso tras el desastre nuclear de 2011 en dicha prefectura de Japón, y máxime después de que la Organización Mundial de Comercio fallara a favor de Corea del Sur en dicho conflicto comercial.
Las autoridades sanitarias niponas han explicado que este refuerzo busca prevenir posibles intoxicaciones por consumir lenguado coreano, pues según sus datos, cada año se registran unos 10 casos en el país nipón. Pese a todo, han recalcado que no se trata de una represalia comercial contra Corea del Sur.