La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Ginebra, Suiza, reveló en un informe publicado el martes 28, hora local, que los norcoreanos sobornan a los funcionarios del Partido de los Trabajadores para sobrevivir y que la corrupción y la opresión se han arraigado en la sociedad norteña.
El informe, basado en entrevistas a 214 desertores norcoreanos, afirma que los funcionarios de dicho país extorsionan habitualmente a los ciudadanos que operan negocios en el mercado negro, amenazándoles con arrestos, encarcelamientos o torturas; presiones que suelen eludir ofreciendo a los funcionarios dinero en efectivo o cigarrillo.
Además, mientras Pyongyang alega que la situación de los Derechos Humanos en su país se agrava por las sanciones de la ONU, el informe señala que incluso en los momentos de mayor dificultad económica, el Ejército es el primero en recibir apoyo.
Al respecto, Corea del Norte ha criticado que es un documento malintencionado y lleno de arbitrarias alegaciones no justificadas.