Estados Unidos volverá a recurrir a la "diplomacia de líderes" para desatar los nudos que obstruyen las negociaciones con Corea del Norte tras la fallida Cumbre de Hanói.
Al respecto, el secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo explicó el día 29 a una radio local de Pennsylvania que espera que el presidente Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un se reúnan de nuevo en unos meses. Agregó que su deseo es que los mandatarios logren algún avance concreto y, de ser posible, alcancen un "gran pacto" sobre desnuclearización.
El canciller estadounidense expresó así que espera una tercera cumbre entre Corea del Norte y Estados Unidos, si bien la vaga expresión "dentro de unos meses" transmite que la situación actual entre ambos países no deja entrever un posible encuentro al máximo nivel en breve.
En cuanto al calendario de desnuclearización, Pompeo se mostró en sumo prudente y evitó hacer comentarios. Solo enfatizó que las sanciones contribuyen al proceso de desarme nuclear, y afirmó que los norcoreanos atraviesan dificultades por el bloqueo económico-comercial, factor que adelantará el calendario.