La prensa extranjera ve en la destitución de Cho Yang Ho como presidente de Korean Air, la caída del magnate al frente del Grupo Hanjin, al ser apartado de sus funciones como máximo responsable de la aerolínea, principal filial del conglomerado, por decisión del consejo directivo. 

Al respecto, el diario The Wall Street Journal aludió a los hechos como un hito contra el gobierno corporativo que dominan los 'chaebol' o grupos empresariales controlados prácticamente en su totalidad por las familias fundadoras, un peculiar fenómeno que marca la sociedad y la economía de Corea del Sur. El rotativo explicó que esas familias ejercen un  control excesivo sobre la administración, pese a poseer un porcentaje relativamente bajo de acciones.

En tanto la agencia de noticias Reuters también publicó un reportaje llamado 'Efectos colaterales de la ira por unas nueces' subrayando que es la primera vez que el titular de un 'chaebol' de Corea es removido de la presidencia de una de sus empresas. 

La agencia Bloomberg, por su parte, dio reciente cobertura al código de conducta adoptado por el Servicio Nacional de Pensiones sobre la intervención del inversor institucional en la toma de decisiones de las empresas. El Servicio Nacional de Pensiones es actualmente el segundo accionista mayoritario de Korean Air.