La película Trabajo extremo ha superado los diez millones de espectadores en apenas quince días desde su estreno, el miércoles 6 de febrero. Así, se ha convertido en la primera producción de 2019 y la vigésimo tercera del cine coreano en lograr dicho aforo.
Asimismo, el periodo tardado en acumular diez millones de espectadores es el tercero menor en la historia del séptimo arte de Corea.
El film narra la historia de unos policías que inician una investigación encubierta y fingen ser los dueños de un pequeño restaurante de pollo frito, cuya misión queda relegada al aumentar drásticamente la clientela del negocio.
Los críticos evalúan que el éxito taquillero de Trabajo extremo se debe en parte a la sed del público de comedias e historias más ligeras, después de las muchas producciones surcoreanas sobre temas serios y muy densos, en términos narrativos, que se estrenaron en 2018.